Fernanda era la madre de Amparo. Vivió siempre en la precariedad he hizo todo lo que pudo para sacar a su hija adelante. La llegada de María abrió una puerta a la esperanza, pues resultó ser alguien con quien nunca pensaba que se podría encontrar.
Hija de republicanos muertos y asesinados durante los primeros años del Franquismo, fue de hospicio en hospicio desde que tuvo uso de razón. Era medio analfabeta y tuvo una infancia terrible, siempre a la merced de la caridad de los demás. Con dieciocho años, se tuvo que buscar la vida y no encontró otra manera de ganar dinero que prostituyéndose en la ciudad de Granada.
Tras quedarse embarazada, acudió a una amiga para que la ayudase, Trini, que dio en adopción a su bebé en el convento donde la pidieron traer a más embarazadas como pago, por lo que convenció a Fernanda, quien acudió no muy convencida. Cuando quiso marcharse, se fue sin saber que tuvo mellizas, algo que sí sabía Trini. Así fue como María acabó con los Vergel, y Amparo con su madre.
El tío adoptivo de María la asesinó cuando esta estaba dispuesta a contar toda la verdad sobre el robo de bebés, y especialmente sobre el robo de María, su hija, a la que cedió a su hermano de manera ilegal. Cometió el error de confiar en Enrique Vergel, y Trini otro muy grave, al callarse.
Justo antes de morir, Fernanda llamó a María para contarle todo lo que sabía gracias a Trini sobre Enrique.
Actualizado por última vez el 10/07/2015.